martes, 25 de agosto de 2009

Campeonatos del Mundo de Atletismo Berlín 2009: Los protagonistas

El pasado 23 de Agosto finalizó la 13ª edición de los Campeonatos del mundo de Atletismo, disputados en la capital germana, Berlín.
Como en todas los campeonatos de atletismo, al haber tantas pruebas y tan diferentes entre sí, hay diversos protagonistas. Podría hablar de mil atletas (mis conocimientos del deporte no son tantos) pero en este artículo me centraré en seis nombres propios que son los que más han dado que hablar estos días. En el próximo artículo, hablaré de la actuación de los españoles en estos mundiales. La separación se debe a que puede no ser ya un tocho considerable (ya hay reprimendas por el del síndrome de la superioridad) lo hago por el simple hecho de una lectutra más sencilla y que los no-aficionados a este gran deporte puedan interesarse un poquito conociendo lo que han dado de si estos mundiales, y un algo de historia sobre otras ediciones que nunca viene nada mal.

Personalmente, seis nombres son los que han destacado por encima del resto, unos por sus logros, otros por fracasos y por la polémica. Hablo de Anita Wlodarczyk, Ryan Brathwaite, Yelena Ysinbayeba, Caster Semenya, Kenenisa Bekele y, por supuesto, Usain Bolt.

Empezamos con la atleta polaca Anita Wlodarczyk, lanzadora de martillo. Sinceramente, yo no la conocía, porque la prueba de martillo no es algo que realmente me interese. Pero debe estar evidentemente en este apartado porque ha batido el récord del mundo de la especialidad. En el segundo lanzamiento de la final, Anita lanzó el martillo hasta unos impresionantes 77.96 superando en 16 cm el anterior récord del mundo, en posesión de la checa Tatyana Lysenko, marca establecida tres años antes. Evidentemente, en el resto de la final Anita no lanzó, porque ninguna de sus rivales pudo batir su récord del mundo. Aquí les dejo con el lanzamiento, un récord del mundo realmente importante, ya que es el único de los campeonatos, si quitamos los dos que ha vuelto a batir el extraterrestre jamaicano.

http://www.youtube.com/watch?v=LYf8NZnh0oI

Seguimos con más protagonistas, y le toca el turno al atleta de Barbados Ryan Brathwaite, campeón del mundo de 110 metros vallas. Lo cierto es que las ausencias de los grandes favoritos, el chino Xiang Liu (sí, un chino que es un crack en la velocidad) y el cubano Dayron Robles, actual plusmarquista mundial de la prueba, propiciaron una carrera sin favoritos, donde podía ganar cualquiera. Esto último es lo que hay que resaltar. Brathwaite podría estar aquí por ser el primer campeón del mundo de Barbados. Pero no es por eso. La carrera fuer impresionante. Ryan Brathwaite venció con un buen registro, 13.14 sacando a los dos siguientes clasificados tan sólo una centésima. Los estadounidenses Terrence Trammell y David Payne, se quedaron a las puertas del título. Una carrera de infarto, que se tuvo que resolver con la foto-finish. La puedes ver desde un millón de ángulos y todavía no sabrías decir quién fue el campeón. Ver a tres atletas llegar prácticamente a la vez a la línea de meta no es algo precisamente habitual, por eso, el ganador Ryan Brathwaite se merece un puesto entre los más destacados de este mundial de Berlín. La foto finish la podéis ver en el link que tiene al lado el que ha subido el video.

http://www.youtube.com/watch?v=6pUib8G7OOU

En el plano negativo, tenemos a una de las mejores atletas de los últimos años. Hablamos de la rusa Yelena Ysinbayeba. Nadie en el mundo del atletismo se explica su actuación. Ni ella misma lo sabe. En la final de salto con pértiga, realizó tres nulos sobre 4.75, una altura escasa, dadas las capacidades que ha demostrado muchas veces esta impresionante atleta. Es la reina destronada, es ver cómo una auténtica campeona sale derrotada de un gran evento. Parece increíble que la plusmarquista mundial sea incapaz de pasar de los 4.75, no obteniendo clasificación alguna. Una mujer que estableció el récord del mundo en unos impresionantes 5,05. Récord, por cierto, que ha batido en nada más y nada menos que en 26 ocasiones. Y no sólo eso, además es la ganadora de las dos últimas ediciones de los prestigiosos premios Laureus (también conocidos como los Oscar del deporte). La doble campeona mundial y olímpica ha sido derrotada en una gran final. Gloria para las atletas que la han batido, la estadounidense Chelsea Johnson, la polaca Monika Pyrek y la campeona del mundo, la también yanqui Anna Rogowska, que sí consiguió los 4.75, suficientes para conseguir el cetro mundial. Os dejo con el vídeo del último salto que se ve desde varios ángulos, aunque tenga una mala calidad, se puede ver bastante bien.

http://www.youtube.com/watch?v=RltYBLiz1mo

Turno para la polémica que tiene nombre propio, la atleta sudafricana de 800 Caster Semenya. Esta mujer de tan sólo 18 años, debutaba en unos grandes campeonatos, habiendo establecido grandes marcas en las categorías junior. Su impresionante físico llamaba la atención, una atleta musculada y con más cara de hombre que de mujer. En las semifinales nos dejó a todos boquiabiertos, ganando con una gran autoridad. La final fue más de lo mismo, imponiéndose con 1:55.45 una marca a dos segundos del récord del mundo. A partir de entonces, surgió la gran polémica. Muchas de las federaciones implicadas en la final, acusaron a la atleta de estar hormonada. No hablamos de un simple positivo, es mucho más grave. Semenya ha sido sometida a pruebas de feminidad, ya que no están convencidos de que sea una mujer.
El caso nos recuerda inevitablemente a esas atletas de la República Democrática Alemana súper hormonadas, unos hombres que se convirtieron en mujeres a base de medicamentos ilegales, maltratadas por su federación, incluso les practicaban el aborto si fuera necesario. Se hincharon a batir récords del mundo pero, como no se demostró nada, aún siguen vigentes. O a esas atletas chinas que surgieron de la nada batiendo plusmarcas en el medio fondo y en el fondo y que después desaparecieron. Y cómo no, al caso de la estadounidense Florence Griffith, actual récordwoman mundial de 100 y 200 metros lisos, que en tan sólo dos años, sufrió una transformación espectacular que la convirtió en la reina de la velocidad, con unas marcas aún no superadas veinte años después.
Pero la sudafricana, aunque su aspecto sea bastante sospechoso, no ha hecho ninguna de esas impresionantes hazañas como las que hicieron las anteriores atletas. Tan sólo ha ganado con una gran exhibición, pero sin marcas estratosféricas. La IAAF (International Asociation of Athletics Federations) le ha realizado multitud de pruebas y, la primera de ellas, señala que Semenya tiene el triple de testosterona que una atleta normal. Diciéndolo así puede resultar algo escandaloso, pero hay que añadir, que los hombres tienen entre 30 y 40 veces más de nivel de testosterona que las mujeres. Todavía no hay resultados definitivos y se seguirá investigando. El tema sigue candente estos días y seguirá dando mucho que hablar. Yo no soy quién para juzgar y no puedo decir si la atleta es culpable o no, dejemos que la IAAF o la justicia si se llega, actúen según las normas.
Lo que sí me parece vergonzoso, es que desde Sudáfrica se diga que es una persecución a la atleta por ser mujer y se negra, un caso de sexismo y de racismo. Eso es una tontería absoluta. En estos mismos campeonatos hay multitud de mujeres negras que han sido campeonas del mundo. Y nadie lo pone en duda. Dos keniatas se han impuesto en 5.000 y en 10.000 m (Vivian Cheruiyot y Linet C. Masai) en las vallas, las jamaicanas Brigitte Foster-Hylton y Melanie Walker han vencido en 100 y 400 m respectivamente; las estadounidenses Allyson Felix y Sanya Richards han ganado en las pruebas de velocidad de 200 y 400 m; y nadie pone en duda la feminidad de la campeona de 100m, la jamaicana Shelly Ann, que podrían decir que es sospechosa de doping por haber establecido la tercera mejor marca de la historia con 10.73. Todas estas atletas son campeonas del mundo. Y son mujeres y son negras. Y nadie discute sus victorias. Así que tildar de sexista y de racista el caso de Caster Semenya, me parece una estupidez absoluta, eso lo dicen gente que se quiere aprovechar de las circunstancias.

http://www.youtube.com/watch?v=DwWI7E9IwAs

Nuestro quinto protagonista es, como no podía ser de otra forma, el rey del fondo en pista, el grandísimo Kenenisa Bekele. Decir a estas alturas que Bekele es el sucesor del otro gran atleta etíope Haile Gebreselassie, es poco menos que un insulto. No tanto, porque ambos son amigos y se llevan de maravilla. Pero Bekele ya no es el nuevo Gebre, es un tipo con nombre y apellido propios: Kenenisa Bekele. El etíope volvió a demostrar su supremacía en las dos superficies: los 5.000 y los 10.000 m. En 5.000 m hizo una marca discreta 13:17.09, pero en los 10.000, estableció un nuevo récord de los campeonatos con 26:46.31. El récord de los campeonatos puede parecer poca cosa para el doble plusmarquista mundial, pero es una muy buena marca. En ninguna de las dos disciplinas tiene rival, si acaso en 5.000 se enfrenta al estadounidense Berrnard Lagat, ese gran atleta que se ha quedado a las puertas de la victoria en 1500 y en 5000 m. que le venció dos años atrás en Osaka. Además, ha sido el primer atleta de la historia en hacer doblete en un mundial en las dos superficies, confirmando así sus victorias en los Juegos Olímpicos de Pekín. Sólo nos queda decir, larga vida al rey Bekele.

Última vuelta y media de los 5.000: http://www.youtube.com/watch?v=---LOIB8idE&feature=related

4 últimas vueltas del 10.000 No es de muy buena calidad, pero suficiente para ver el poderío de Bekele: http://www.youtube.com/watch?v=TRCB-wrPIUY

Y, como no podía ser de otra forma, terminamos con Usain Bolt. El extraterrestre. El marciano. En mi vida había visto algo igual. Mira que le tengo un poquito de manía, porque yo era muy fan del gran Michael Johnson y el año pasado le arrebató el récord de los 200 m por los pelos, con 19.30. Esperaba que este año no sucediera lo mismo, pero pensar eso cuando corre este jamaicano, es completamente de locos. Ha vuelto a arrasar y dejar al mundo boquiabierto, preguntándose donde está el límite de este hombre, que acaba de cumplir tan sólo 23 añitos, una criatura.
La primera vez que le ví correr, fue en las series de los Juegos de Pekín. El jamaicano se dejó ir los últimos 30 metros, porque ya tenía la carrera ganada. Hizo un tiempo sensacional: 9.92. Yo me quedé alucinado. Si este tipo es capaz de hacer ese tiempazo yendo al trote los últimos 30 metros, no sé de lo que será capaz si corre a sprint todos ellos. Lo demostró y estableció el récord del mundo en 9.69, dándole tiempo a mirar a los lados y a darse golpes en el pecho. Pues bien, entre show y show en las carreras antes de emepezar y después, llegó la final de Berlín. Hablaban de un ridículo duelo con el estadounidense Tyson Gay. Yo alucinaba, porque este tío no tiene rival. Pero, aunque suene demencial, sí lo tiene. Porque Gay es humano. Porque Gay es el ser humano más rápido del mundo. Bolt viene de Marte, o de Júpiter, o de donde ustedes quieran. En esta ocasión no se anduvo con historias, se exprimió hasta el final. Porque le obligaron. 9.58. 11 centésimas menos que su antiguo récord. Para quitarse el sombrero, aplaudir, etc. Todos los elogios posibles para Bolt son insuficientes, son tantos, que podríamos escribir un libro entero alabando su actuación. Pero lo mejor de todo no es eso. Es que la plata, el señor Tyson Gay, hizo nada más y nada menos que 9.71 a dos centésimas del que parecía un récord imbatible, el 9.69 de Pekín. Gay había hecho que Bolt se exprimiera al máximo, porque si no, le vencía. Y mención especial a Asafa Powell. Por fin una buena carrera del compatriota de Bolt en una gran final, quedando bronce con 9.84, una marca que nos parece ahora mismo irrisoria, pero que en 1996 era récord del mundo. Solamente nos queda dejaros el vídeo con la actuación de Bolt.

http://www.youtube.com/watch?v=By1JQFxfLMM


Pero nos queda el 200. Si el año pasado batió el récord de los récords, el estratosférico 19.32 del glorioso Michael Johnson, que estableció en los Juegos de Atlanta '96 con cronómetros del siglo XXI, todos pensábamos que era imposible que lo rebajara esta vez, porque corrió como nunca en esa carrera y por poco lo superó. Después de verle en el 100, todo era posible. Bolt ganó las series dormido casi literalmente, ya que le decía a la cámara con su habitual ritual (rima estúpida me ha quedado) de gestos, que eso no eran horas de correr y que era tiempo de echar una parlotada con la almohada. Y llegó la final. Hablar de rivales en este 200 ya ni tiene sentido. Porque las marcas del segundo y el tercero en el récord de Johnson eran mejores que las de este año de esos mismos hombres. La marca de Bolt asusta: 19.19. Capicúa. Este hombre puede bajar de los 19 segundos en el 200. Si se empeña puede hacerlo. Tras ver las dos marcas en ambas pruebas, uno se imagina como sería la cosa. Ambos récords, los ha rebajado en 11 centésimas. Un mes antes de Berlín, estaría tranquilamente sentado en una hamaca, probablemente fumándose un porro aunque esté prohibido (ya saltamos con los tópicos) charlando con su entrenador, su amigo, su novia o con quién ustedes quieran, manteniendo una conversación en plan fantasma.

UB: ¿Cuántos jugadores hay en ese juego europeo que dan patadas a un balón y lo tienen que meter en una portería?
X(llamémosle así): Me parece que son 11 por equipo.
UB: ¿Qué te juegas a que rebajo mis dos récords del mundo en esas 11 centésimas?
X: Jajajaja, no te lo crees ni tú ni tus antepasados.
UB: ¿Qué te apuestas?
X: Lo que quieras
UB: Una botella de ron y 5 canutos
X: De acuerdo. Cómo me voy a poner

Dicho y hecho. Os dejo con el vídeo del 200 para que alucinéis un rato:

http://www.youtube.com/watch?v=vjHQZ2VNUyw

Ya en el 4X100 y recién cumplidos los 23, Jamaica no batió el récord del años pasado, aunque 37.31 es una marca estupenda. Porque los 37.10 de Pekín, es una marca de otro mundo, parecía impensable que se batiera el 37.40 de EE.UU y lo hicieron en 30 centésimas. El alcalde de Berlín, le ha regalado un trozo del mítico muro con su figura pintada a escala real. Hoy, Bolt ha anunciado que quiere practicar el salto de longitud. Puede parecer otra fantasmada más del jamaicano, pero es muy habitual ver a velocistas practicar esta disciplina. Si este tío supera el récord de Mike Powell, el mítico 8.95 de los mundiales de Tokyo '91, en el que tuvo un duelo histórico con Carl Lewis, sería algo no ya sobrehumano, sobre-extraterrestre. Y no digamos ya si pasa de los 9 metros. Ya no le hago un monumento, habría que hacerle un edificio entero para él sólo. Espero que no se pase al 400 y que el récord de Michael Johnson, el 43.18, el único gran récord de los mundiales de Sevilla '99 tenga larga vida. Usain Bolt sólo tiene 23 años, así que nos quedan muchos para sentarnos en el sillón y empezar a ver el espectáculo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Gran entrada. Viva el atletismo joder.

Full Norbert dijo...

Gracias. Espero hacerlo tan bien en el de los atletas españoles, aunque habrá un poco de cera en general...

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