Un Tipo Implacable

Aspecto de la portada

El pasado 2006 aparecía la última novela de uno de los mejores escritores de la historia llamado Elmore Leonard. He dicho de los mejores de la historia, sí, aunque por desgracia no es muy conocido en España, pero en el resto del mundo se reconoce su tamaña obra. Como siempre. Pero eso no quita para que sea uno de los más grandes y que debería estudiarse en las universidades (y puede que también en los institutos) por lo menos en EE.UU, ya que es un autor que da millones de vueltas a la mierda de los best-sellers que se leen en este país. Y por mucho que me vengan diciendo que El Perfume, El Código da Vinci o Los Pilares de la Tierra son muy buenos (no me los he leído, ni pienso) no se pueden comparar con el genio que nos ocupa.

Dejémonos de historias, vamos al libro de Leonard. Eso sí, contando un poco mis expriencias con la novela, claro.

Mi hermano y yo estábamos en unos grandes almacenes donde vimos el libro. La portada es negra y se observa la espalda de un tipo disparando y se ve un agujero como si fuera de cristal. Aparecía el nombre de Elmore Leonard y un llamativo título: Un Tipo Implacable. Algo más abajo, había una tira de papel de promoción donde había una frase de Stephen King que rezaba así: “Es increíble que Elmore Leonard haya escrito su mejor novela a los 79 años”. Yo pensé que no era para tanto. Di la vuelta al libro y leí el argumento, vi el precio de 18,00 € y a los pocos días mi hermano se lo compró.

La historia simplemente es genial, acojonante. Solamente Elmore Leonard es capaz de crear una historia tan buena, que te enganche sólo con leer la parte de atrás y no digamos ya con la presentación de los dos personajes principales.

El maestro echándose un pitillo

La novela está ambientada en la Oklahoma de los años 30’. Carl Webster es un joven ayudante de sheriff mitad indio, mitad cubano, que pese a su corta edad es un reconocido policía por haber matado a un famoso atracador de bancos llamado Emmett Long. Su antagonista es Jack Belmont, que después de chantajear a su padre Onis, un magnate del petróleo, sus ansias son las de convertirse en el enemigo público número 1, intentando superar a los grandes como Bonnie & Clyde, Machine Gun Kelly, John Dillinger y Baby Face Nelson. Tras ir cada uno por su lado se encuentran ambos defendiendo un bar de carretera por diferentes circunstancias, y en el que Jack mata a siete miembros del Ku-Klux-Klan que querían prenderle fuego y Carl mata al jefe de la banda, llamado Nestor, mientras le decía su gran frase que le convirtió en un policía famoso: “Si me veo obligado a sacar el arma, dispararé a matar”. A partir de este incidente, en el cual quería aprovechar la situación de Jack para detenerlo, se produce una persecución en varios encuentros, ya que Carl quiere atraparlo para ganar mayor prestigio y Jack juró matarlo.

Los personajes:

Carl Webster: Es el protagonista. Es un joven ayudante del sheriff que desea subir de rango y que su trabajo sea conocido. No es un hombre muy violento, pero no duda en abrir fuego si es para hacer justicia. Está enamorado de una joven pelirroja, Louly Brown, con la que desea casarse. Es un tipo atrevido, muy inteligente, fuerte y su principal objetivo es meter entre rejas a Jack Belmont.

Jack Belmont: Es el antagonista de Carl Webster. Tras chantajear a su padre y conseguir dinero, se dedica a atracar bancos para ser famoso. Ha tenido varias novias, entre ellas Heidi. No duda en usar la violencia para conseguir sus objetivos, y tras el encuentro que tuvo con Carl en aquél bar y después de haber estado en prisión, su único propósito es matarle por haberle engañado.

Tony Antonelli: Es un periodista que trabaja para la revista True Detective. Es un freelance que siempre está detrás de cada hecho violento que sucede. Su único deseo es retratar a los grandes gangsters y a los policías que los persiguen y, de paso, inmortalizarse.

Louly Brown: Es la supuesta novia de un chantajista llamado Pretty Boy Floyd, asesinó a un tipo llamado Joe Young y actuó con frialdad cuando llegó la policía. Es la novia de Carl, y busca en él protección y amor, ya que trabaja de camarera y los viejos siempre la meten mano.

Oris Belmont: Es el padre de Jack. Es uno de los grandes magnates del petróleo en Oklahoma. Es un tipo muy rico, pero vive atormentado por su hijo, que lleva una vida peligrosa como delincuente que no entiende, ya que podría darle todo el dinero que a Jack se le antojase.

Virgil Webster: Padre de Carl. Luchó en la Guerra de Cuba cuando tenía alrededor de veinte años. Vive con una mujer que no es la madre de Carl, ésta falleció, y se pasa la vida plantando nogales y sacando beneficios que le dan sus pequeños pozos petrolíferos.

Jackie Brown llevada a la pantalla por Quentin Tarantino

Con estos personajes nos encontraremos a lo largo de Un Tipo Implacable. Pero sin duda, me quedo con los dos protagonistas y su presentación. En el primer capítulo, nos narra cuando Carl se encuentra por primera vez con Emmett Long con tan sólo 15 años, recordándonos constantemente la anécdota de Long con el helado sobre el bigote. El segundo capítulo nos habla de Jack Belmont y de cómo estafa a su padre haciendo arder uno de los tanques de fuel de su empresa petrolífera.

Sólo dos capítulos para conocer a los protagonistas, uno para cada uno. Elmore Leonard nos presenta a dos jefes, a dos auténticos maestros cada uno a un bando de la ley. En tan sólo dos capítulos, Leonard nos hace echar babas presentando a Carl y a Jack, y diciéndote que devores el libro porque te ha atrapado y no tienes remedio. Sólo deseas conocer las historias de los dos personajes y ansías que se crucen sus caminos. Si encima le añades a un periodista que sólo quiere ser famoso, a chicas guapas, dosis de violencia que la hacen más interesante, tipejos de la calle, perdedores, delincuentes y policías persiguiéndolos, obtienes lo mejor de la novela negra, todo ello orquestado perfectamente por Elmore Leonard, con sus diálogos de la calle tan impactantes y su gran capacidad narrativa. Esto merece una explicación: Leonard es capaz de dejarte colgado en un punto importante de una conversación y empezar a hablar del pasado de los personajes, el ambiente de la calle, lo que hay en una casa, para que te pierdas y, de pronto, te devuelve a la conversación y te mete de nuevo en tensión. Es un tira y afloja constante, que te intriga describiendo una situación de misterio, pero mientras te relaja hablando de cosas sin apenas importancia. Con estas aptitudes, sin lugar a dudas, nos encontramos ante un genio.

Un Tipo Implacable se suma a la larga lista de obras maestras del autor de Cocktail Explosivo (Jackie Brown llevada al cine por Quentin Tarantino), ¡Paga lo que debes! (Cómo Conquistar Hollywood), Pronto, El Blues del Mississippi y un larguísimo etcétera. Pero no acaba aquí la cosa: Un Tipo Implacable no es una genial novela más de su genial autor y que se añade a la lista de sus grandes obras. No. Ni mucho menbos. Estamos hablando sin lugar a dudas y sin miedo a equivocarnos, a que esta novela es una de las grandes del género. Uno habla de novela negra y con ello se refiere a Dashiell Hammett y sus Halcón Maltés, La LLave de Cristal, Cosecha Roja; a Raymond Chandler con Adiós Muñeca, El Sueño Eterno; a James M. Cain y su Cartero Siempre Llama Dos Veces (llevada la cine por Billy Wilder, Perdición) a James Ellroy y sus novelas sobre Los Ángeles, L.A. Confidential, La Dalia Negra, América, Seis de los Grandes entre otros muchos autores. Pero yo no tengo dudas. A pesar de lo que diga la revista Qué Leer no incluyendo en su texto sobre este gran género ni a Ellroy ni a Leonard, la cosa está clara: si te hablan de novela negra, te están hablando de Elmore Leonard, de su Cocktail Explosivo, de su ¡Paga lo que Debes! y, por supuesto, de Un Tipo Implacable.